Preparando sus finanzas para la adopción
27 de mayo de 2016
Actualizado el 23 de abril de 2020
¿Cuál sería una emergencia financiera repentina en tu vida? Podría ser una tormenta que cause daños masivos a tu hogar o verte afectado por una pandemia, como el coronavirus (COVID-19). También podrá ser algo más personal, como un accidente que podrá limitar su capacidad de ganarse el sustento. En tiempos de incertidumbre, muchos se preocupan por su salud y sus finanzas.
Sea lo que fuera, si alguien debe intervenir para ayudarle ante una situación de emergencia, es importante que tenga un plan para que sepan qué hacer.
Un kit de emergencia financiera es un componente fundamental en la planificación financiera. En pocas palabras, un kit de emergencia financiera incluye identificar y planificar ante posibles emergencias económicas que podrán afectar a sus seres queridos. Preparar algo que dé resultado excede el simple hecho de organizar el papeleo, implica analizar una diversidad de posibles situaciones en tu vida y preguntarte, “¿qué es lo peor que podría ocurrir?”
Debes preparar un kit, es decir, una cantidad de instrucciones y documentos impresos y digitales, que te ayuden a ti o a otra persona de confianza a manejar una crisis. A continuación, algunos ítems que podrás incluir:
1. Documentos patrimoniales. La planificación patrimonial es sin dudas la máxima forma de planificar para una emergencia financiera, ya que abarca la totalidad de las emergencias financieras personales, incapacidad médica o la muerte. ¿Su familia puede acceder fácilmente a esta documentación si a usted le ocurriera algo? En su kit de emergencia financiera familiar, los documentos relacionados con el patrimonio incluyen copias de testamentos vigentes (de usted y de su cónyuge o pareja), directivas anticipadas (que indican a los médicos cómo actuar con respecto a las etapas finales de vida u otras etapas de atención médica), poderes de salud y financieros (que designan a personas específicas para intervenir en la administración de su dinero o salud, si usted no puede hacerlo) como también otros documentos que brindan más indicaciones sobre el manejo de los negocios y la administración y distribución de otros bienes que tenga. Asegúrate de mantener al día siempre estos documentos y de incluir la información de contacto de todos los expertos calificados que participaron en su preparación, como abogados especialistas en bienes inmuebles o negocios, profesionales en impuestos y planificadores financieros.
2. Pólizas de seguro. Poder encontrar las pólizas de la vivienda o del automóvil ante un desastre natural es pan comido, pero es importante pensar de manera más abarcadora. Recopila la mayor cantidad posible de detalles de las pólizas y contactos relacionados con la cobertura de salud, discapacidad, vida y accidente que tengas, y recuerda que es particularmente importante anotar o archivar documentación de estas coberturas en el trabajo, también. En ocasiones, firmamos casi a ciegas los beneficios laborales, pero recién nos damos cuenta de lo importante que pueden ser en una emergencia financiera.
3. Documentación de impuestos. Si un familiar fallece o queda incapacitado, los asuntos fiscales igualmente deben ser atendidos. Si acudes a un profesional en impuestos, asegúrate de incluir tu información de contacto en el kit de emergencia tanto físico como digital (consulta Índices, contactos y guías a continuación). También es importante conservar las declaraciones de impuestos antiguas e información de respaldo pertinente de acuerdo con tu situación fiscal individual.
4. Documentos de inversiones, ahorros y jubilación. Si trabajas con un experto en impuestos o un planificador financiero calificado, podrás acceder a un sistema particular que enuncia y lleva un seguimiento de esta información de manera organizada, algo que muchos de nosotros no tenemos en casa. Independientemente de cómo planifique y controle sus inversiones, debe incluir esos datos en su kit.
5. Índices, hojas de contactos y guías. Algunas personas necesitan un poco de orientación, otras, mucha. Un kit de emergencia financiera familiar debe poder ser utilizado por todos los miembros de la familia designados. Ponte en el lugar de un amigo o familiar al que llamas para pedirle ayuda ante una crisis. Si tuvieras que ayudar a un amigo o familiar ante una emergencia patrimonial, médica o un desastre y la persona no está cerca como para poder consultarla, ¿qué información necesitaras para empezar? En cualquier categoría de información que incluyas en un kit de emergencia financiera, agrega un archivo o instrucciones digitales por separado que detallen a qué personas llamar, números de cuenta si es necesario, direcciones físicas y electrónicas y otros datos clave para orientar a la persona acerca de lo que tiene en sus manos y qué deberá hacer. Si trabaja con expertos financieros calificados, asegúrese de incluir su información de contacto.
6. Fácil acceso a lo esencial, asegurado bajo llave. Si no estás en casa en el momento de ocurridos los daños o si tus familiares necesitan acceder a vehículos u otros lugares, asegúrate de guardar llaves y códigos de acceso de forma segura en tu kit de emergencia. También debe garantizar que sus contactos de emergencia puedan acceder debidamente a su kit de emergencia para poder obtener dichos materiales. Es posible que usted o sus seres queridos además necesiten acceder a fondos, especialmente en efectivo, ante una emergencia. Si no abriste una cuenta bancaria estrictamente para emergencias que permita a determinados miembros de la familia emitir cheques o retirar dinero en efectivo, considera hacerlo.
Resultado: Preparar un kit de emergencia financiera requiere tiempo para planificar, pero le ayudar a prevenir mayores pérdidas y agilizar las decisiones especialmente durante tiempos de incertidumbre como en el caso de pandemias. Trabaje con gente confiable de forma que sea accesible y útil para su familia y personas de su confianza.
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